En 1994, a iniciativa de Héctor Acosta y Nina Marentes, el Colegio Mexicano de Intérpretes de Conferencias, A.C. (CMIC) estableció el Premio Malintzin® como un reconocimiento de este cuerpo colegiado a un miembro de la profesión particularmente destacado que sobresalga de sus pares por su ética, profesionalismo, solidaridad y compañerismo, y se caracterice por fomentar el respeto, procurar el bien ajeno y dignificar la profesión.